El promotor y administrador único de Sun Golf, Ricardo Miranda,imputado el caso que lleva el mismo nombre y en el que se investiga una presunta estafa inmobiliaria a unas cien familias irlandesas, ha declarado que prestaba servicios a Ocean View Properties para la construcción de 400 viviendas, y que nunca tuvo relación con los clientes, ni física ni por escrito.
El juicio, que tuvo lugar el pasado 21 en el juzgado de instrucción número 16 de Madrid, se celebró tras la querella presentada contra los directores de Sun Golf Desarrollo Inmobiliario S.L. y Ocean View Properties por presunta estafa y apropiación indebida por tres promociones fallidas en Estepona (Málaga), Marruecos y la República Dominicana.
Respecto a la promoción de Estepona, Miranda declaró que “en ningún momento” tuvo ninguna relación con los clientes, ni físicamente ni por escrito, ni ha recibido “ninguna cantidad económica”, según la declaración judicial a la que ha tenido acceso Efe.
El querellado manifestó que hizo un acuerdo de prestación de servicios con Ocean View Properties, que tenía comprada la parcela en diciembre de 2004, y se personó en una notaría para escriturarla el 9 de septiembre de 2005 sin que el propietario hiciese lo propio.
Miranda expuso que todos los contratos que se realizaron con los compradores los hizo Ocean View, con quien llegó a una acuerdo de prestación de servicios para que construyera 400 viviendas y que “al final de toda la promoción tendría un margen de un 8 % de beneficios”.
En cuanto a la parcela de Punta Perla, en la República Dominicana, Miranda dijo que la compañía es “propietaria de todos los terrenos y poseen licencias de todo tipo”, y que los clientes tienen “una garantía sobre un terreno valorado en 95 millones de dólares”, que “cubre con exceso” en el caso de que en 2013 no estén acabadas las viviendas.
Sobre la parcela de Marruecos, manifestó que Ocean View Properties contactó con sus clientes para comunicarles “la iniciación de dicho proyecto”, y que entraron sabiendo que “primero había que conseguir los terrenos y luego las licencias”, por lo que recibían una bonificación del 50%.
Los hechos se remontan a 2006, cuando la agencia inmobiliaria Ocean View Properties alcanzó un acuerdo de comercialización con la promotora Sun Golf Desarrollos Inmobiliarios SL por el que la primera se comprometía a captar a ahorradores británicos para invertir en esta promoción y la segunda se encargaba de construir los inmuebles.
En el caso se han visto afectados casi un centenar de familias irlandesas e inglesas que han interpuesto una querella por una presenta estafa y apropiación indebida relacionada con la construcción de 350 apartamentos en la zona de Arroyo Vaquero, en Estepona (Málaga), que finalmente no se ejecutó.